Por: Ivette Cáceres, Directora Académica del BBA Barna

El networking es una de las competencias más mencionadas en el mundo directivo y emprendedor. También conocido como capital social o capacidad de generar redes de contacto, según el escritor Harvey Mackay el networking se refiere a la habilidad de encontrar rápidamente a quien necesitas en cualquier situación y ayudar a otros hacer lo mismo. El networking, permite hacer más a través de los demás, obteniendo consejos, retroalimentación, conocimientos, conexiones laborales, sociales y de negocios, entre otras.

La habilidad de interconexión ha existido desde los inicios de la humanidad, pero a raí­z del surgimiento de las redes sociales el mismo cuenta con potentes herramientas que contribuyen a organizar y gestionar los contactos de forma más dinámica y global. Sin embargo, es importante resaltar que dichas herramientas, sin la capacidad humana de estrechar lazos, generar confianza y conectar, no son más que un recipiente para guardar tarjetas de presentación de personas de las cuales luego no recordamos las caras. Por lo cual, la habilidad de networking no solo requiere saber utilizar las redes sociales, si no también la capacidad de generar conexiones duraderas y fructí­feras.

Aclarado esto, ¿Cómo podemos aprovechar las redes sociales, para potenciar nuestro capital social?  En la conferencia Networking en la Era Digital, ofrecida por el consultor Filipe Carrera para el BBA Barna, el mismo nos recomienda algunas acciones que pueden ayudarnos a fomentar el networking en esta era.

La primera sugerencia es definir muy claro cuál es nuestro objetivo al momento de insertarnos en una plataforma. ¿Será una red social para compartir con familiares y amigos?¿Deseamos una red para fomentar la generación de negocios? ¿La deseamos para compartir un tema de interés, crear una marca personal o promover contenidos específicos?  Tener clara la meta, ayuda a determinar la red, el discurso y las palabras claves que debemos utilizar para lograr lo que nos proponemos.

En segundo lugar, el profesor Carrera propone pensar glocal, es decir, tener una mirada local y global, ya que las redes sociales, nos permiten acceder a contactos en todo el mundo de forma exponencial. En este sentido, también nos invita a buscar mentores, personas que ya han logrado objetivos similares a los nuestros y pueden guiarnos en nuestro camino.  Es cuestión de buscarlos en la red y atrevernos a contactarlos.

Por último, una de las ventajas de la era digital es que las redes sociales nos permiten aprovechar o facilitar las conexiones débiles, es decir, ese contacto de segundo o tercer nivel (el amigo, del amigo, del amigo). Las conexiones débiles nos ayudan a contribuir al éxito de los demás sin necesidad de comprometer nuestra responsabilidad. Muchos de los negocios o relaciones que se establecen en las redes sociales, vienen de estos contactos. Como dice Filipe cada persona que no conocemos es una puerta de entrada a una nueva red.

En conclusión, el networking es una herramienta clave para maximizar nuestros resultados, y para ello, lo más importante es tener esa capacidad de atrevernos a conocer, conectar y apoyar a las personas.  Las redes sociales pueden potenciar este proceso de relacionamiento, por lo cual es importante estar conscientes de su poder y de cómo lo que hoy hacemos y posteamos, al igual que en la vida presencial, puede repercutir en el logro de nuestros sueños.